Para quien no lo sepa, la publicidad en Facebook o Facebook Ads suelen venderse como si de la repera en bicicleta se tratase. Y, en la teoría, así es, puesto que, una vez determinado el presupuesto para la campaña, se filtra la promoción o anuncio (sea de una publicación en una página de Facebook o la propia página de fans) por sexo, edad, localización e intereses de los usuarios de dicha red social. Dicho de otro modo, ofrecen publicidad segmentada.
Lo cual tiene mucho sentido ya que de poco sirve que un chaval de 15 años vea un anuncio de una compresa contra la pérdida de orina, ¿verdad?
Ahora bien, estan empezando a surgir opiniones contrarias a la publicidad en Facebook. Todos sabemos de páginas de Fans con miles de seguidores y poquísima interacción. Del tipo "A 2500 personas les gusta esto" y "15 personas están hablando de esto".
Los hay incluso que han ido más lejos y han realizado sus propios experimentos. Y la conclusión es impresionante:
LOS "ME GUSTA" CONSEGUIDOS MEDIANTE FACEBOOK ADS SON ROBOTS.
Empecemos por explicar qué es un robot. En éste caso estamos hablando de perfiles falsos manejados por programas y que, evidentemente, no interactúan a no ser que se les pida hacerlo. Todos los que sentimos un poco de curiosidad sobre cómo ganar seguidores en Facebook terminamos por descubrir portales donde "comprar" (sí, comprar), fans para Facebook, Twitter, Google Plus y lo que te de la gana. Y, obviamente, es bastante repelente, puesto que sabemos de antemano que se trata de perfiles falsos y, como se suele decir, mejor calidad que cantidad, ¿verdad?
Lo que es verdaderamente sorprendente es que la propia plataforma de Facebook utilice robots por su propia cuenta para hacer creer a sus clientes (como tú) que dejarse el dinero en su plataforma, funciona.
Os preguntaréis de donde salen estas conclusiones y sobre qué se basan. Pues me parece lo más correcto, ahí va: aquellos que han realizado sus experimentos con la publicidad de Facebook han descubierto que sus nuevos seguidores carecían de actividad más allá de dar "me gusta" a páginas de fans. Y, lo más curioso, daban "me gusta" a páginas contradictorias, del tipo "Amo los gatos" y "Odio los gatos". A ver, o los amas o los odias, ¿no?
En definitiva, yo no quiero decir que la publicidad de Facebook es una estafa pero sí recomiendo tener esto muy en cuenta e ir con cuidado. Personalmente, soy consciente de que, a nivel corporativo, tener una legión de fans (aunque sean falsos) da sensación de poderío. Al menos a primera vista, puesto que enseguida se ve el nivel de interacción desproporcionadamente bajo cuando se compran fans. Pero, como siempre, desde Marketillo recomendamos el camino difícil, el desafío, el tedio de ganarte los seguidores gracias a tu buen trabajo de community management.
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